Más de 5.000 policías recorren las calles de Madrid para reclamar que el Gobierno central les permita jubilarse antes de los 65 años.
La manifestación transcurre en un ambiente festivo y un camión con go-gós ameniza la concentración. En la marcha no falta el sentido del humor y los policías van en silla ruedas y con pañales, haciendo alusión a la avanzada edad a la que, a su juicio, se tienen que retirar de su vida laboral.
La movilización ha sido promovida por la Confederación de Seguridad Local (CSL) y la Coordinadora de Policías (COP), que agrupa a una veintena de sindicatos de agentes locales.
Estas organizaciones han convocado a policías locales de toda España a manifestarse hoy en la madrileña Plaza del Emperador Carlos V (glorieta de Atocha) de la capital.
Los promotores de la marcha explican que la actual legislación fija la edad de jubilación de los policías locales a los 65 años, cuando los policías nacionales y los bomberos pueden jubilarse a los 60.
La CSL y la COP argumentan que hay estudios que prueban el “deterioro psicofísico” de los agentes locales a partir de cierta edad, por lo que, de continuar la actual situación, se “hará imposible en pocos años una lucha eficaz contra el creciente aumento de la delincuencia”.
Además, estas organizaciones de policías locales argumentan que poder jubilarse antes no conllevaría un gasto para el Estado, porque esta mejora se basaría “en la autofinanciación de los gastos que ocasiona el adelanto de jubilación”.