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Ratificado el fallo por el altercado del pasado Carnaval

La Audiencia de Cádiz ha desestimado el recurso de apelación presentados por Anxo Bastida y Joaquín Bustamente. De este modo ratifica la sentencia del Juzgado de lo Penal número 2, que el pasado 29 de abril condenó a los dos jóvenes a un año de prisión, cada uno, como autores de un delito de atentado a la autoridad y a una multa por delito de lesiones a otros dos policías locales.

Los hechos se produjeron en torno a las tres de la mañana del 4 de febrero de 2008, esto es, el domingo de Carnaval del pasado año, en la plaza de la Cruz Verde. Según la versión de la Policía Local, los agentes fueron requeridos por operarios del servicio de limpieza, a fin de que intervinieran porque un grupo de personas se “dedicaban a arrojarles botellas de vidrio, impidiéndoles realizar su trabajo”, como recoge la resolución judicial.

Se añade que los policías instaron a los que allí se encontraban, entre ellos los acusados, a abandonar la zona, “pero lejos de ello respondieron insultando y lanzando botellas a los agentes que se vieron obligados a utilizar las porras y pedir auxilio a efectivos del Cuerpo Nacional de Policía”. Durante la intervención policial, se apunta que Bastida se dirigió a uno de los policías, al que le propinó dos puñetazos, uno de ellos en el cuello. Por su parte Bustamante, se recoge en la descripción de los hechos, arrojó una botella de vidrio contra otro policía, al que alcanzó en el pecho.

Por su parte los dos detenidos por los hechos acontecidos en la plaza de la Cruz Verde argumentaron en el recurso presentado a la sentencia del Juzgado de lo Penal número 2 que se produjo “una extralimitación en las funciones de los agentes que intervinieron, llevando a cabo una auténtica carga policial, sin que existiera alteración del orden público”.

Unas declaraciones por parte de los acusados que para la Audiencia Provincial de Cádiz no han sido determinantes ya que, se especifica, “no hay razón alguna para dudar de la credibilidad de los agentes policiales, que ni conocían ni tenían motivo para implicar a los acusados en los hechos”.

De este modo la Audiencia resuelve ratificar la condena, como se ha señalado, de un caso que suscitó un cruce de acusaciones públicas por parte de los implicados. Los acusados hacían pesar sobre la Policía Local una serie de declaraciones en las que ponían en duda su actuación en referencia al abuso de autoridad, llegando incluso a señalar la intención de denunciar ellos a ocho policías.

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